La fase de adaptación de la zona se concluirá a finales de 2017 cuando comenzará el movimiento de mineral para procesar ferroníquel. Se trata de un lote con reservas limitadas.
Montelíbano – Córdoba: Cerro Matoso tiene previsto aumentar la producción de ferroníquel en cinco mil toneladas anuales entre los años 2018 -2020 al entrar en operación el yacimiento La Esmeralda, un área aproximadamente 100 hectáreas adyacentes a la mina tradicional que a finales del año pasado recibió la licencia ambiental del Estado para explotar mineral.
Para el presidente de Cerro Matoso, Ricardo Gaviria, se trata de una veta mineral relativamente pequeña por lo que el alivio en producción se podría extender sólo a dos o tres años.”La Esmeralda aumentara la producción de CMSA en los años 2018 y 2019 a una cifra aproximada a las 40 mil toneladas, pero ese alivio será sólo por dos años, ya que se trata de un área con reservas limitadas. Como se ha informado, el agotamiento del deposito de mineral genera notables bajas en la producción desde el año 2014. Después del alivio de La Esmeralda, se mantendrá la tendencia a la baja. Para el año 2029, cuando expire la licencia de Cerro Matoso, se estima una producción cercana a las 30 mil toneladas por año”.
La inversión que debe hacer Cerro Matoso para extraer mineral del predio La Esmeralda para el procesamiento, asciende a USD$15 millones en compra de equipos, construcción de un puente sobre el río Uré y diques para evitar inundaciones.
“Es posible que a finales del 2017 se empiece a mover material pero en un volumen pequeño, ya que la fase de construcción y montaje del puente finaliza en febrero de 2018. Se trata de un puente con capacidad para camiones de 190 toneladas. El ancho del puente de once metros y la longitud es de 50 metros, además se construirán 4 diques en 1.528 metros y una vía camionera de 1.6 kilómetros. El proyecto también contempla actividades de compensación ambiental desde el inicio de las operaciones, además de la instalación de una cerca perimetral”, señala el presidente Gaviria.
Para lograr esta expansión, Cerro Matoso cumplió con todos los requisitos de ley para solicitar la licencia ambiental y demás permisos necesarios. Así mismo, la empresa implementó robustos procesos de socialización y consulta previa con las comunidades campesinas e indígenas de Centroamérica y Puente Uré, que ayudaron a profundizar el conocimiento y confianza mutua.
Adicionalmente, estos procesos son reconocidos por la industria y las entidades del Gobierno como ejemplo de buenas prácticas para el país.